He llegado a la conclusión de que, cuando mis hijos están realmente motivados, es cuando hacen las cosas que tienen que hacer. Se dan una prisa enorme en vestirse si saben que vamos a ir a ver sus primos, recogen la habitación en un pispás si ven que cuando acaben les voy a hacer churros, hacen los deberes sin tener que recordárselo si esperan jugar a la consola después. Y, para estas cositas, los talonarios divertidos para niños y niñas de Malmesos vienen genial.