Queridísimo Mayor:
Esta semana cumples 11 años y ya te veo la adolescencia apareciendo detrás de las orejas. A veces te miro y me parece oírte pensar que nadie te entiende, entonces me da pánico y me da pena… Tengo miedo de no saber estar a la altura de los nuevos cambios que vas a experimentar dentro de poco. Y me da pena aquellos años en los que todo lo solucionaba un beso de mamá.