Hace tres meses decidí tomar la píldora. No es que me haga mucha gracia, pero tras el susto de las Navidades, me he decidido. Así que, en mi caso, más que un método anticonceptivo, es un regulador de la menstruación.
Cuando en enero me vino la regla tras dos meses de ausencia, llegué a la conclusión de que no quería volver a pasar por un susto así. Estaba convencida de que no estaba embarazada, pero como aquí mi amiga no hacía acto de presencia, al final empecé a dudar.
En febrero fui a la consulta de mi ginecóloga, a mi revisión anual. Y aproveché para hablarle del tema. Yo lo tenía muy claro: quería algo que me regulara el ciclo menstrual. Y suponía que la mejor opción era la píldora. Pero como yo no soy ginecóloga, estaba abierta a otras opciones.
En la consulta, me recomendó el DIU, que al parecer ahora es hormonal. Me habló maravillas de él: que si duraba varios años, que si solo liberaba dos hormonas que no pasaban por la sangre ni por el hígado (si lo recuerdo bien) y, para terminar, me dijo que me lo pensara, me dio un folleto explicativo y así me fui a casa.
Cuando llegué, me lo leí entero. Y descubrí que, efectivamente, evitaba el embarazo pero que, si este llegaba a producirse, el embrión no llegaba a asentarse en el útero y el cuerpo lo rechazaba. Yo no quería un método anticonceptivo, pero el DIU me pareció más un método abortivo. Aquí cada una puede elegir el método que mejor le venga para no quedarse embarazada, yo no voy a entrar en eso. Pero para mí, esa no era una opción válida.
Además, según el mismo folleto, podía pasar que la menstruación se hiciera tan escasa que se saltara algún mes, sobre todo el primer año de estar con el DIU. Así que tampoco me servía para controlar la menstruación.
Volví a la consulta pensando que quizás mi ginecóloga intentaría convencerme de ponerle el DIU. Pero no fue así. Le dije que había leído el folleto que me dio en la anterior consulta, pero que prefería la píldora. Y eso fue lo que me recetó. De camino a casa pasé por una farmacia y la compré. Ese mismo día me había venido la regla, así que empecé a tomármela.
CONTRAS:
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Al ser una pastilla, cada vez que voy al médico tengo que informarle de que estoy tomando la píldora. Y esto es un rollo.
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Además, puede tener efectos adversos. Yo soy la rara que se lee los prospectos de los medicamentos. Y algún médico ya me ha dicho que, si todo el mundo los leyera, nadie tomaría medicinas.
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Tal como me dijo la ginecóloga, al ingerirse, pasa por el hígado. Pero afortunadamente, la píldora que me ha mandado parece ser una de las más suaves del mercado.
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Tengo que recordar tomármela todos los días. Y yo tengo muy mala cabeza. Así que me he puesto una alarma diaria en el móvil para que no se me olvide. Y aún así, suelo olvidarme de tomarla un día al mes.
PROS:
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El mes que me he olvidado de tomarla un día, obviamente ya no es muy fiable para la anticoncepción. Pero yo no la quería para eso, sino para regular la regla. Y en esto no interfiere que no me la haya tomado un día.
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Ahora sé cuándo me va a venir la regla, no tengo que estar esperándola días o semanas. Así que estoy preparada y no me pilla desprevenida.
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Mi regla, súper abundante desde que di a luz a mis hijos, ha disminuido su flujo. Me sigue durando siete días, pero noto muchísimo que me venga algo más suave.
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También noto menos molestias menstruales.
Yo la tomo desde que tenía unos 19 años y también para regular la menstruación. Soy de reglas largas (de hasta 14 días con pausa de un par de días en medio), abundantes ( cambio de compresa de noche cada hora) y muy dolorosas. Con 18 años tenía una anemia de hierro de caballo y me caía por los rincones…así que con 19 el médico decidió recomendarmela. Se acortó, disminuyó la cantidad muy notablemente y el dolor se convirtió en molestia soportable. Ahora puedo tener vida!!! Y me recuperé de la anemia. Para mi es media vida. He intentado dejarla en varias ocasiones…aprovechando los embarazos y tal….pero después de la segunda…. mi regla volvió peor que nunca…con más cantidad y dolor… así que de momento no me lo planteo.
Gracias por compartir tu experiencia ?
Mira que yo siempre me he quejado porque, con 7 días, creía que mi regla duraba muchísimo (a mis amigas les duraba unos 4 días). No me imagino lo que es que dure casi dos semanas. Si además tenías dolores y anemia, no me extraña que te la recetara el médico.
Está claro que los embarazos nos trastoca todo el cuerpo, yo después del primero tuve regla abundante, pero es que tras el último, me sentía como un grifo abierto… Pero la píldora me ha mejorado bastante la regla en ese aspecto, así que creo que la seguiré tomando durante un buen tiempo 🙂
Muchas gracias a ti por compartir también tu experiencia.
Yo tengo un contra más. Hace años tomaba la píldora, ahora me hab dicho mi gine y el hematólogo que por mis problemas de coagulació si la tomase me juego un trombo pulmonar y que no me vale la pena, recomiendo que algo tan delicado como las hormonas tengas más controles, porque a las que padecen trombofilias está contraindicado. Conozco otro caso igual de una amiga cercana. Para nosotras todo lo hormonal fuera! Espero que sirva a las que lo toman como opción a una analítica sanguínea de rutina.
A mí en general no me gusta tomarme medicamentos, pero a veces no me queda más remedio… Antes de tomar la píldora, mi ginecóloga me mandó análisis y ahora tengo que hacerme otros de control. Además también pasé por el cardiólogo. Como todo estaba bien, empecé a tomármela. Nunca está de más hacerse las pruebas que hagan falta para saber que un medicamento no te perjudica en otro aspecto.
¡Muchas gracias por tu comentario! Efectivamente, es un contra en el que no había caído 🙂