Se acaba el verano. Ha pasado muy rápido. Tanto que me he dado cuenta de que no he publicado nada sobre helados o polos, ¡con lo que me gustan! No tengo perdón. Pero con esta entrada de hoy voy a ponerle remedio.
Cuando alguien dice “polo”, inmediatamente hay otro alguien que piensa en zumo congelado. Bueno, sí, ésa es una forma de hacer polos. Muy sana, sí, pero muy vista también.
Hoy os traigo una forma diferente pero igual de fácil para hacer polos de chocolate, pero sin nata ni huevo. Sólo os hace falta yogur griego, que es más consistente y cremoso, que sea natural y sin azucarar. También necesitaréis cacao en polvo y miel o azúcar al gusto. Y, por supuesto, moldes. Yo usé unos de polos que compré hace años, pero podéis usar vasitos. Más fácil imposible. Y refrescante. Y también sano.
CONTRAS:
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Hay que tener espacio en el congelador. Aseguraos antes de poneros manos a la masa, no os pase como a mí, que luego no puedo hacer los polos por falta de espacio.
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Si compráis moldes de polo (los míos son de supermercado), escoged el que mejor se adapte a vuestra casa. Me explico. Si quienes más van a disfrutar de los polos son los niños, elegid moldes que puedan agarran con facilidad y que sean pequeñitos. Un niño puede tardar mucho en comerse un polo, por muy rico que esté, por lo que se le empieza a derretir y chorrear.
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Como hay que congelarlo, hay que esperar. Y es un rollo.
PROS:
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Lo bueno de hacer polos caseros es que sabéis exactamente qué lleva y en cuánta cantidad.
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Si no tenéis sitio en el congelador, no os preocupéis. Lo ponéis en la nevera y está igual de rico comido a cucharadas.
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Es una buena forma de que los niños coman yogures.
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Al hacerlo en casa, se pueden añadir infinidad de cosas. Algunas ideas: pepitas de chocolate, trozos de fruta, frutos secos, semillas, ralladura de naranja, etc.
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Lo puede hacer cualquiera, desde el más inexperto en cocina como los niños de la casa.
Os dejo del vídeo de cómo lo hago yo. No he puesto cantidades porque es más o menos a ojo, pero creo que se entiende bastante bien. Y si no, preguntadme vuestras dudas en los comentarios de esta entrada o en los del canal del blog en YouTube.
Y vosotros, ¿hacéis polos caseros o preferís los comprados? ¿Cuál es el sabor que más os gusta?
Que buena pinta tienen por dios! y como habrán disfrutado los niños.
Este verano a mis gallinas se les fue la olla poniendo huevos, y pensé busco tutoriales y vídeo tutoriales y me hago unos helados bien ricos, si los hice! me quedaron riquísimos, pero son un pecado, a mi hijo le gustaron mucho, yo comia mas que el! si no dejo de hacerlos se me habría puesto un culo como una plaza de toros!
Como buen tauro soy una sibarita sin limite! dios que vicio.
Un abrazo
¡Pero si tienes hasta gallinas, Faly! Esos huevos son los más ricos, mi abuela tenía gallinas y sus tortillas eran las más amarillas y sabrosas. Helados no hacía, pero me puedo imaginar lo buenos que están, no me extraña que hayas tenido que dejar de hacerlos… aunque un caprichito de vez en cuando nunca viene mal 😀
¡Besotes!
¡Qué buena pinta! Yo hago unos de nocilla, leche y nata, que también están requetebuenos. En mi blog no he puesto nunca la receta (ni esa, ni ninguna otra, por qué será, ja, ja 😀 ) pero te dejo un enlace en el de mi hermana que sí lo ha puesto: http://mundosinglutendemarga.blogspot.com.es/2012/08/polos-de-nocilla.html
Un besito! 🙂
Buena pinta tienen los de tu hermana. Lo pongo en mi lista de helados a probar y espérate tú que no me pase como a Faly y tenga que dejar de hacerlos… ¡la Nocilla es mi perdición!
Por cierto, acabo de ver que tu hermana sí tiene Twitter… tú no sé a qué esperas, jejeje 😉
¡Beostes!
Si es que eres de un apañao… Yo, de peque, los hacía con Tang! (que ya no existe).
Es que se hacen súper fáciles y rápido 😀
¡Es verdad! ¡El Tang! Mi madre nos los hacía con ColaCao y a mí me sabían súper ricos… Bien, llegados a este punto creo que ha quedado bien patente lo que me pirra el chocolate, jeje…
¡Besotes!
Creo que se borró mi comentario 🙁
Decía que, de peque, yo los hacía de Tang.
Y que eres muy apñaíta 🙂
¡Lo he rescatado! No sé por qué, pero wordpress te lo había marcado como spam. Ya está solucionado 😉
Esto tengo que probarlo yo, ñam, ñam
No te arrepentirás y, si no, ya me contarás 😉
¡Besotes!